El Congreso endurecimiento las penas contra la delincuencia común, ahora no habrá gracias en casos de parricidio, asesinato, genocidio, pandillaje pernicioso y terrorismo.
La iniciativa, sustentada por el presidente de la Comisión de Justicia, Rolando Sousa, plantea la modificación del Código de Procedimientos Penales a fin de que el beneficio de la confesión sincera no otorgue beneficios en los casos de trata de personas, violación sexual de menores, hurto y robo agravado, tráfico ilícito de drogas, desaparición forzada, tortura y terrorismo. Tampoco se aplicará a delincuentes habituales o reincidentes.
El artículo 136 del Código de Procedimientos Penales señalaba que los beneficios de la confesión sincera estaban prohibidos solo para los casos de secuestro y extorsión. “La norma aprobada va a evitar la impunidad y dará una mayor seguridad jurídica”, comentó el legislador Sousa.
“En caso de asesinato, se acogían a la confesión sincera y obtenían penas por debajo del mínimo legal… Lo que ha hecho el Congreso es ponerse los pantalones de la seguridad ciudadana y ese beneficio no va más”, comentó el parlamentario Fujimorista.
